lunes, 12 de abril de 2010

Mi mente es un despertador muy eficaz ^^

Realmente pienso que la mente humana es un profundo mar lleno de misterios. Más allá de que muchas cosas hayan sido, sean y serán explicadas por la ciencia, la verdad es que nunca dejarán de sorprendernos. Así, por ejemplo, hay enfermedades que el mismo cuerpo no puede reconocer hasta que ya es demasiado tarde y por ende, nosotros no sabemos identificar. Nos creemos superpoderosos, dueños del mundo y sus verdades, pero, en realidad, no somos más que simples peones de nuestras mentes...

Hoy, por ejemplo, me salvo de faltar a clases. 

Ayer, después de bañarme y ponerme el pijama, el celular que tenía empezó a apagarse y a quedarse tildado. Lo cual es extraño, ya que apenas tiene 1 año de uso. La cuestión, es que para prevenir el quedarme sin celular en todo el día, decidí cambiar el chip a uno mas viejito, pero irrompible. La cuestión es que el aparato tenía muy poca batería, y acostumbrada a que el que usaba se podía cargar y aún así la alarma seguía funcionando, me fui a dormir de lo más tranquila.
Esta mañana, me desperté un tanto intranquila, pero serena al notar que la alarma no había sonado. "Sí, puedo dormir un ratito más" pensé. Y traté de  volver a conciliar el sueño. Pero no pude. "Bueno, me voy a levantar y a tratar de adelantar unas cosas que tenía que llevar hechas a la facu al día siguiente". Pero, al ver la hora, me percaté de que eran las 7:20, y el  horario de la clase era a las 8:00. 
"Fuuuuuuuck" pensé al instante y juro que jamás preparé las cosas con mayor celeridad en lo que va de mi vida. Para las 7. 30, ya había preparado el bolso, peinado la maraña que tenía en la cabeza (dejandola bastante aceptable a la vista... o por lo menos lo más alejado de la melena de león con la que me había levantado), tomado una taza de café, me había cepillado los dientes y estaba arriba del taxi yendo rumbo a la facultad. 
"Zafé" pensé. Pero no todo es tan fácil en mi vida. Cuando miro en la billetera, tenía dos billetes de $5, uno de $2 y uno de $50. El de $50 era para pagar unos apuntes, así que no contaban para nada a la hora de efectuar el pago. Lo que me dejaba con $12, y usualmente me sale $13 o $14. Iba con el tiempo justo, así que caminar iba a lograr que llegue tarde a la clase. Empecé a revolver el bolso, buscando algunas monedas que pudieran acercarme lo más posible a los $14, pero no había NI UNA!! 
"Bueno, veo hasta donde llega con los $12, y de ahí veo como me muevo" pensé. La cuestión, es que gracias al toque de algún angel, el viaje con los $12 pesos me alcanzó hasta la entrada por suipacha (Y). El taxista, que terminó siendo el dueño del video club donde alquilo las pelis, se ofreció a llevarme hasta santa fe (sin saber que no tenía cómo pagarle, ooobvio), pero fui lo bastante convincente como para no tener que lisonjearle un peso ^^. Y es que, ya sea porque soy muy orgullosa, o porque no me gusta deberle favores a nadie (lo que está íntimamente relacionado con el orgullo) quedar en deuda con alguien nunca fue para nada de mi agrado.

Pero volviendo al tema por el que empecé a escribir, si esa alarma no hubiese sonado en mi cabeza diciendo : TE TENES QUE LEVANTAR PARA IR A LA FACULTAAAD!! y que no me dejó volver a dormir, hoy hubiese terminado con un ausente en Química Biológica, y probablemente también en el espacio de Tutorias.



(Maca ♔)

No hay comentarios:

Publicar un comentario